Cuando alguien es sentado en un trono se dice "entronizado"; si se atora en una red, se dice "enredado"; si sufre aplastamiento por algo que le cae encima, se dice "aplastado"; si lo clavan en una cruz se dice "crucificado" y, obviamente, si lo inmortalizan poniéndolo en una estampilla tiene que decirse "estampillado". De ahí el título de este comentario: "Evo Morales estampillado", porque desde ayer circulan en Bolivia y el mundo estampillas o sellos postales con la imagen del actual presidente de Bolivia en tres poses y con tres indumentarias distintas.
Según el diccionario de la Real Academia Española "estampillado" es la "acción y efecto de marcar con estampilla". En Bolivia esa palabra tiene dos acepciones populares, una cuando la imagen de un personaje es impresa en estampilla o sello postal; la otra cuando algo o alguien cae desde gran altura y choca contra el suelo quedando plano como una estampilla a causa del impacto.
Volviendo al tema, describimos las tres estampillas:
La primera, para correspondencia a Europa, cuesta Bs 6 ($us 0.75). En ella aparece Evo Morales durante la ceremonia indígena de toma del mando originario en Tiwanacu el 21 de enero, vestido con un llamativo poncho ritual incaico, sombrero de cuatro picos símbolo del Tawantinsuyo ,y bastón de mando.
La segunda, para correspondencia a países de América cuesta Bs 5 ($us 0.60) muestra a Evo después de la transmisión del mando en el Congreso Nacional el 22 de enero, luciendo las insignias del mando presidencial: Banda Tricolor y Medalla del Libertador
La tercera, para uso interno en Bolivia, cuesta Bs 1.50. Aparece el presidente saludando al público con un campo petrolero de fondo.
Esta emisión de estampillas con la imagen de un presidente de Bolivia en ejercicio no es la primera; varios mandatarios recibieron similar homenaje en vida, motivando críticas a su vanidad y condena a la adulonería de autoridades de correos que se remachaban en sus cargos gracias a esas estampillas. Otros presidentes fueron estampillados después de muertos, lo cual no levantaba polvareda por tratarse de homenajes póstumos ajenos por completo a la vanidad, al narcisimo, a la figuronería y a otros defectos mundanos.
¿"EGO" MORALES?
El reciente estampillamiento de Evo, del mismo modo que aconteció con sus antecesores, dio lugar a elogios de sus partidarios y críticas de sus adversarios. Fue, además, motivo para endilgar al presidente el mote de "Ego" Morales por un reciente Decreto Supremo suyo que declara Patrimonio Nacional a Orinoca, su pueblo natal, y consagra como Monumento Histórico Nacional la casa donde él nació. En la justificación gubernamental para estas "declaratorias" se remarca la necesidad de fomentar el turismo hacia esa alejada población altiplánica donde el actual presidente fue dado a luz y lanzó su primer berrinche.
Dejamos a nuestros lectores juzgar si el mote de "Ego" es o no apropiado para Evo Morales.
MINUCIO
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