Tal como estaba previsto, ayer se concretó el binomio del Movimiento al Socialismo (MAS) con Evo Morales Ayma candidato a la presidencia de la república y Alvaro García Linera a la vicepresidencia. Es el segundo binomio presidencial públicamente confirmado. Primero surgió el de Unidad Nacional (UN) con Samuel Doria Medina para presidente y Carlos Dabdoub para vice.
Evo-Alvaro viene a ser lo que podría calificarse como un binomio "t'ara-q'ara", vale decir un indígena neto, primero, en pareja con un blanco "joverito" de clase media, segundo. Es la primera vez que eso acontece en la política boliviana. El sueño de García Linera es que el MAS, en alianza con sectores sociales campesinos, laborales y cívicos, triunfe por el voto ciudadano en las urnas convirtiendo a Evo Morales en el primer presidente indio de la historia.
Como antecedente de unión electoral parecida, pero a la inversa, tenemos, en la última década del siglo pasado, al dúo Gonzalo Sánchez de Lozada-Víctor Hugo Cárdenas, binomio "q'ara-t'ara", con el "gringo" Goni de presidente y el aymara Cárdenas de vice, aunque algo decorativo.
Actualmente, siguiendo esta clasificación, Doria y Dabdoub forman un binomio "q'ara-q'ara", porque ambos son blancos y barbados. Su alianza, según ellos, es unificadora de Bolivia porque conjuga diversidades regionales de oriente y occidente, así como aspiraciones comunes de desarrollo nacional, dentro del modelo económico tradicional.
En los últimos años, a medida que menudeaban las convulsiones sociales y movilizaciones campesinas, fueron ganando espacio los calificativos de "t'ara"(ignorante,estúpido, bobo, en quechua) y "q'ara" (desnudo, pelado, persona de tez blanca, en quechua y aymara) palabras de connotación tradicionalmente despectiva, la cual fue quedando atrás para insertarse en el léxico popular con significación más bien racial.
Así, ahora se dice "t'aras" a los campesinos en general, sean aymaras, quechuas u originarios de cualquier denominación. "Q'aras" a los de tez blanca dizque descendientes de europeos y a los mestizos blancoides que son los más, sin hacer distinciones porque sean "collas" del occidente o "cambas" del oriente.
Desde esta óptica Bolivia es un país compuesto por "t'aras" como mayoría poblacional en proceso de superar su exclusión secular, y "k'aras" como minoría aún dominante. Es una polarización que inevitablemente tiene que desembocar en un tránsito a la integración y coexistencia pacífica de ambos grupos en un marco de unidad nacional que respete las diversidades.
Lo ideal sería que eso se haga por la vía democrática, mediante elecciones como la de diciembre próximo; no por la vía de las convulsiones sociales que bien conocemos y cuyos efectos hemos padecido en los últimos tiempos.
MINUCIO
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