( CUENTA REGRESIVA ELECTORAL: DÍA 18 )
La recta final de una campaña electoral siempre depara sorpresas, no sólo respecto a los candidatos presidenciales favoritos sino también a otros candidatos importantes como aquellos que buscan ser elegidos prefectos departamentales, vale decir autoridades máximas de orden regional equivalentes a los llamados gobernadores en otros países.
Nuestro comentario de hoy está motivado por el comportamiento sinuoso y oportunista de José Luis Paredes (Pepelucho) candidato a Prefecto del departamento de La Paz en la lista de Poder Democrático Social (PODEMOS), cuyo candidato presidencial es Jorge “Tuto” Quiroga.
Cabe aclarar que Pepelucho, fue Alcalde de la populosa ciudad de El Alto hasta hace poco cuando renunció para habilitarse como candidato a Prefecto. Ostenta en sus antecedentes el haber logrado la más alta votación de la urbe alteña cuando fue elegido alcalde y tiene su propio partido denominado “Plan Progreso” (PP) ahora circunstancialmente aliado con PODEMOS.
Debido a su propio caudal electoral y gran popularidad en la ciudad de El Alto, Pepelucho fue invitado por varios partidos, entre ellos el MAS, PODEMOS e incluso Unidad Nacional (UN), para ser candidato a Prefecto. Con esas tres opciones a la mano, finalmente se decidió por PODEMOS. Al concretarse la alianza entre Pepelucho y “Tuto” ambos pensaban que obtendrían réditos electorales mutuos de tal unión. Entonces todo parecía indicar que así sería.
Sin embargo, tales previsiones fallaron. La última encuesta de preferencias de voto para Prefecto en el departamento de La Paz, difundida por la red Bolivisión, hace tres días, mostró al candidato José Luis Paredes de PODEMOS con 49.8 %, seguido por Manuel Morales del MAS con 17.7 %. Vale decir que Pepelucho tendría ya asegurada su elección como nuevo Prefecto de La Paz.
Lo inesperado en la misma encuesta, respecto las preferencias de voto para candidatos presidenciales en el departamento de La Paz, es que Evo Morales del MAS aparece de primero con 47 % seguido por “Tuto”Quiroga de PODEMOS con 24.5%, lo cual podría interpretarse como que buena parte de los adictos a Pepelucho no comulgan con “Tuto”.
Presumiblemente por interpretar las cifras de ese modo Pepelucho saltó espectacularmente a la palestra, ayer mismo, proclamando su disposición a divorciarse de “Tuto” y repudiar a PODEMOS para buscar alianza con Evo Morales y unirse al MAS. Obviamente fue la noticia del día y la ciudadanía se quedó con la boca abierta. Evo Morales reaccionó rechazando tajantemente cualquier posibilidad de alianza con José Luis Paredes, a quien calificó como “el mejor símbolo del transfugio político”. Jorge “Tuto” Quiroga, por su lado, se quedó mudo; no dijo ni pío.
Es difícil entender por qué estando de primero en las encuestas, con la prefectura virtualmente en sus manos, Paredes haya cometido tan gran desatino. Mucha gente que pensaba votar por él ya no lo hará. El oportunismo descarado inspira desconfianza.
En política se ven muchas cosas, algunas inverosímiles, pero muy pocas veces una demostración de saltinbanquismo electoral como el protagonizado por Pepelucho. En adelante, cuando se cometa algún acto de oportunismo político mayúsculo habrá que decir “es una pepeluchada”.
MINUCIO
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